«Si algunos políticos se armaran de valor para mirar las atrocidades que Rusia está cometiendo en Ucrania, tal vez despertaría su humanidad».
Así lo afirmaron las diputadas del partido Progresívne Slovensko (Progresistas de Eslovaquia), que durante los últimos días han realizado un viaje de trabajo a Kiev. Junto con sus socios europeos del ALDE [Grupo de la Alianza de los Liberales y Demócratas por Europa] se reunieron con los máximos representantes de Ucrania y visitaron además la región devastada de Chernihiv —en el norte del país— que ha sufrido la ocupación rusa.
«Vladimir Putin está cometiendo un genocidio en Ucrania. Hemos visto con nuestros propios ojos lo que significa tener a Rusia como «vecino», declaró Beáta Jurík, vicepresidenta del Comité del Consejo Nacional de Asuntos Europeos de la República Eslovaca. «Ataques diarios con drones y misiles contra objetivos civiles, niños secuestrados, mujeres violadas y otras atrocidades cometidas por los rusos en los territorios ocupados. Son crímenes de guerra que la propaganda rusa intenta ocultar», subrayó Jurík, que visita Ucrania por tercera vez este año.
Las diputadas visitaron la localidad de Jahidne donde el ejército ruso mantuvo recluidos en el sótano de una escuela primaria a más de 300 habitantes durante todo un mes sin agua ni comida ni luz ni higiene ni posibilidad de moverse, desde un bebé de un mes hasta personas de 90 años. Varios de ellos murieron a causa de las condiciones catastróficas en esa sala de horror.
«Fue una de las imágenes más espantosas que se pueden ver hoy en día. Cuando los supervivientes describieron cómo les trataron los rusos, todos los que estábamos en la sala lloramos», dijo Jurík. A quienes justifican esta guerra vergonzosa o se dan la mano con los representantes del régimen de Putin, la diputada les recomendó que experimentaran la sensación de ver los dibujos infantiles en las paredes o los objetos que se conservan en las habitaciones. «Quizás así despertaría de nuevo su humanidad», añadió Jurík.
Según la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos y Minorías Nacionales del Parlamento, Lucie Plaváková, Vladimir Putin robó en un segundo la infancia a los niños ucranianos. «Las mujeres ucranianas que trabajan en diversos servicios públicos, desde la sanidad hasta el ejército, nos han descrito cómo los niños pequeños ya saben distinguir por el sonido si un misil viene de Rusia o defiende Ucrania. Hemos escuchado testimonios de cómo mueren los padres mientras abrazan a sus hijos para protegerlos. Cómo los padres, cada mañana, cuando llevan a sus hijos a la guardería, se preguntan si volverán a verlos», señaló.
También destacó que más de 19 000 niños ucranianos han sido deportados a territorio ruso o se desconoce su paradero. «Y estos son solo los casos documentados. El número real de niños que los rusos están arrancando de sus familias es mucho mayor. Es muy triste que el Gobierno eslovaco, liderado por Robert Fico, no se haya sumado a la coalición internacional para el retorno de los niños ucranianos, que se puso en marcha oficialmente hace más de un año», declaró Plaváková, quien también insta al primer ministro a que repare esta vergüenza internacional. «Todos deberíamos ponernos de acuerdo para que los niños regresen a los brazos de sus padres», añadió.
Según la miembro del Comité del Consejo Nacional de Cultura y Medios de Comunicación, Dana Kleinert, los rusos aterrorizan día y noche a la población de Ucrania. «Disparan contra la población civil, bombardean guarderías, bloques de pisos y hospitales, y saben muy bien a qué apuntan. En Chernihiv, han destruido 109 edificios de infraestructura cultural. A pesar de ello, los habitantes no se rinden y poco a poco van reparando todo lo destruido», afirmó Kleinert.
Las diputadas pudieron ver cómo, en tres años de guerra, los ucranianos han reconstruido más del 80 % de la infraestructura solo en Chernihiv, incluidos 38 puentes, numerosas escuelas primarias, viviendas y centros sanitarios.
«A pesar de la guerra y de las terribles historias que nos han contado los ucranianos ya nos han superado en muchos aspectos. Tienen una experiencia valiosa e importante y han adquirido conocimientos que saben y quieren compartir con sus socios extranjeros. Se trata de innovaciones, sistemas informáticos, procedimientos médicos, programas sociales, pero también de enfoques verdaderamente inclusivos para promover la cultura, el arte y la protección del patrimonio cultural», concluyó Kleinert.
Artículo publicado originalmente en The Epoch Times Eslovaquia con el título «Poslankyne PS navštívili Ukrajinu a skonštatovali, že Putin tu pácha genocídu».
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